La Fuente - Patones, Madrid

Silvia G.

La atención del dueño espectacular, híper atento y cordial.
Siento por él poner esta reseña.
Nos hospedamos el viernes en la habitación La Acacia.
La cama con un colchón viejísimo.
Todo muy sucio, las ropas de cama, cojines, adjunto fotos, y mal olor en las almohadas.
No había alfombrilla de baño, ni cortina ni mampara.
La suciedad era palpable en toda la casa.
El desayuno un despropósito, bollería industrial, fruta picada… y poco más.
Creo que debería dar una vuelta a la casa, el mantenimiento y la limpieza.
Él dueño un encanto pero debe cuidar esto.
Gracias

Gonzalo S.

Casa rural en un entorno inmejorable. Muy confortable y agradable en la que te encuentras como en casa….. incluso mejor. La persona que nos atendió (Miguel) todo un anfitrión. Hasta nos trajo una hogaza del pan del pueblo para desayunar. Repetimos seguro

Maria R.

Estuvimos una noche, de Viernes a Sábado y todo perfecto. Nos alojamos en la habitación n°4, todo muy limpio y en un lugar perfecto para desconectar. |Las zonas comunes y el desayuno todo listo para poder usarlo.|Los dueños fueron muy amables en todo momento y con total disponibilidad para dudas y reserva.|Sin duda, un 10.

Israel L. S.

El dueño nos atendió muy bien vía WhatsApp, explicándonos todo y atendiendo nuestras demandas. Nos alojamos en la habitación n°2 (La Acacia). La casa está bien ubicada, y es bonita y está limpia. Pero, el dueño tiene que cuidar algunas cosas:
- Los colchones son muy incómodos, deben tener muchos años y los muelles sobresalen y nosotros al menos no descansamos bien.
- El WiFi no nos funcionó, la red que indicaba el cartel de la habitación no la encontramos.
- Las puertas de las habitaciones además de la de la entrada, chirrían y se escuchan cuando se abren o cierran. Deberían ser engrasadas para evitar esos ruidos tan molestos desde la habitación.
- La bañera no tiene ni mampara ni cortina, lo que provoca que el suelo del baño se encharque mientras te duchas.
- El desayuno deja mucho que desear. Algo de fruta, bollería industrial, café y tostadas de pan de molde. Había 4 paquetes de los cuales 3 estaban caducados, uno de ellos desde el mes de julio (nos alojamos la noche del 5 al 6 de octubre). Como prueba adjunto las fotos. El dueño debería de tener cuidado con este tipo de cosas.

Me sabe mal tener que decir todo esto, porque el dueño nos atendió muy bien, pero debe cuidar este tipo de cosas.

Yolanda S. R.

La casa es bonita y bien situada, pero se oye todo lo de alrededor, tanto de fuera como los huéspedes de otras habitaciones. La habitación estaba limpia pero la cisterna no dejaba de sonar y tuvimos que cerrar el agua.
El desayuno muy mal para el precio, se limita a bollería industrial y pan de molde de baja calidad. Zumos de brick y leche solo tenían leche entera y otra abierta de no sabemos cuando.

Demelsa

Desde el momento en que me puse en contacto con Miguel (El dueño) fue muy atento y amable conmigo, se preocupó en todo momento de que llegara bien y no me faltara de nada, aceptan animales, fui con mi perro y fue encantador con él, la habitación me pareció una maravilla, grande con baño propio y espacioso, la zona común más maravilla todavía, te sientes como en casa y hacen que así sea, con cocina para que puedas prepararte lo que necesites, para cualquier cosa podías escribirle o llamarle por si te faltara lo que fuera, él lo iba a buscar, bueno no tengo más que palabras buenas para este sitio que recomiendo al 100% si vais a Patones de arriba. Muchas gracias Miguel!!! ☺️

Carlos R. A.

El alojamiento es muy bonito y acogedor, con ese toque rústico y limpio que todos buscamos. La cocina y zonas comunes están genial, muy completas y cálidas. El desayuno estuvo muy bien, pero sin duda lo mejor de todo fue la atención y el trato por parte de Miguel Ángel, una persona 10. Nos acogió de una manera increíble, explicándonos y enseñándonos el lugar así como contándonos la historia de Patones. Sin duda volveremos y ánimo a todos a ir porque se convirtió en una experiencia única y gracias a él nos sentimos unos vecinos más del pueblo. Gran combinación de Lugar + Alojamiento + Toque Humano 😄

David M.

Es un lugar muy acogedor. Estuvimos un fin de semana y fue agradable la estancia.
Tienes una cocina en un área común donde tienes cosas para desayunar, con leche, zumo, tostadas y algo de bollería y un micro y placa donde puedes preparar algo de comer.
El único pero es que está poco aislado del ruido interior y se oye mucho el abrir y cerrar puertas y la gente entrando y saliendo.
La atención de María muy amable y simpática.