Hotel restaurante Felipe II - Ayna, Albacete

Clavo O.

El hotel tiene muy buen aparcamiento, con muchas plazas disponibles por lo que es un valor añadido.

En la parte de recepción casi nunca hay nadie, cuando está es un chico joven agradable que te recibe con una sonrisa, destacar que nos cobraron la habitación por adelantado (nunca nos lo habían hecho) y se quería "escaquear" de hacernos factura, por supuesto que quiero mi factura.

La habitación, bueno te la limpian todos los días, te la dejan calentita, toallas muy blanquitas y bueno nada mucho más que destacar, personal de limpieza un 10.

En las habitaciones de escucha todo gente roncando de no se que habitación, la tele de otro lado, otro loco que se tiraba 1 hora moviendo muebles todos los dias, y a las 7 una manada de viejos saliendo de las habitaciones como Ñus pegando portazos, y hablando como si estuviesen sordos.

Decepción en cafetería con el tan nombrado "Pepe" el cual nos atendió de malas formas y con mala gana de hacer nada, con actitud negativa, quisimos salir fuera y para él era un trauma casi limpiar una mesa del rocío de la mañana (8.30 am estábamos solos, pero solos...solos), aparte de mal rollo que transmitía...eso se nota al momento. Al contrario de la camarera Sandra que era un encanto, todo fueron sonrisas, buen recibimiento, diálogo, y con actitud positiva!

Лариса ?.

El hotel está situado en medio del SILENCIO de montaña con fantásticas vistas, muy acogedor con restaurante y terraza donde se sirven comidas y cenas, bar y tienda, salón con chimenea (aunque necesita una buena reforma). La comida es única para los aficionados: sopas de la cocina española, costillas de cerdo a la parrilla y pescado. Fue un poco inesperado: no había ninguna verdura, pero sí mucho vino. El personal es amable y servicial. Mi agradecimiento especial a MARI por la ayuda oportuna y desinteresada por motivos puramente humanos. Un hotel para quienes valoran el ambiente agradable, la tranquilidad y la belleza de la naturaleza en Larisa.

Sevienela_Ruina

Sólo fuimos a cenar, pero desde el principio se vio venir. El comedor vacío y nos sientan a 10 cm de otra pareja. No nos traen ni la carta ni nos preguntan por la bebida hasta pasado un rato largo. Pedimos dos cosas y se olvidan una (la ensalada la tomamos finalmente de postre). Los tiempos lentísimos y desorganizados, la comida normalita.

Mariana L.

Hotel súper recomendable si vas a Ayna. Pedir que os pongan la habitación con vistas a la montaña, impresionantes.

Pero lo más destacado del hotel es la amabilidad, cercanía y profesionalidad del restaurante. Tanto los camareros Pepe y Dio como el cocinero Manuel de lo más simpáticos. La comida muy buena y el trato inmejorable, siempre intentado hacer nuestra estancia más agradable.

Sin duda recomendable al 100x100.

Juan A.

Preciosa visita al pueblito de Ayna para visitar Río Mundo, nos alojamos en este Hotel un grupo de personitas de edad vamos a decir con experiencias.
De todo de todo nos hemos quedado con el
Cariñoso trato amable de su personal, desde el cocinero pasando por el metre y camareros/as , gracias chicos por ser así.
Dar las gracias a esa maravillosa guía, camarera, anfitriona y gran persona que es esa chiquita de negro así como la otra muchacha rubita que al igual que el resto del equipo, su objetivo común siempre a sido el de hacernos la estancia lo más agradable posible y lo consiguieron con creces.
Mil gracias a todos.
PD: Estoy seguro que para la próxima nos abrís la disco jajaja

fco.Javier M.

Un hotel en un lugar increíble y con una ubicación inmejorable, ( con bastantes cosas a pulir en el hotel ) pero con un servicio de 10 del personal eso sí en especial de Noemi una de las camareras. Muy recomendable. Y espero que lo calláis arreglando poco a poco porque es increíble pero necesita darle vida. Todo constructivamente ya que volvería sin duda y lo recomiendo.

Valli C.

El hotel está muy bien para viajar con la familia y amigos.
Las vistas son estupendas, de verdad son impresionantes, una preciosidad.
La cafetería que tiene esta súper bien, el personal de verdad una pasada, son muy amables y divertidos; te ayudan con todo. Dio, Pepe y Manolo, el cocinero, son personas de lo más agradables, nada más que por ellos ya me gustaría volver. La comida es casera y está buenísima. Tiene un salón interior y una terraza fuera que da al pueblo y al valle, con unas vistas impresionantes. El hotel tiene una sala con Chimenea que si quieres encenderla avisas y la encienden, esa sala tiene varios sillones y sofás, mesas y sillas además de la chimenea, puedes jugar al ajedrez o como yo hice allí jugué al Parchís o pasar el rato al lado de la chimenea. Las habitaciones están muy bien, pero si quieres buenas vistas pedir que te pongan en las habitaciones de la 102 a la 108 o directamente pedir que te pongan una habitación con vistas a la montaña con la virgen.
El pueblo es muy bonito, pero fui en invierno, temporada baja y estaba todo un poco desierto, pero para descansar de verdad muy bien; hay que venir en fiestas o a partir de mayo a Octubre o en Navidad ya que está todo más ambientado y animado, pero igualmente un pueblo muy bonito en el que se grabó Amanece que no es poco. Yo sin duda volvería mil veces.

Irene R.

Llevé a un grupo y quedamos encantados. Comimos excelente y la atención fue increíble. Quedamos completamente enamorados de las vistas, pero sobretodo, del personal del hotel. Nos hicieron sentir como en nuestra casa