Hotel Cañitas Maite- Restaurante Gastronómico - Casas-Ibáñez, Albacete

Sergio A.

El día 22 de Marzo reservamos para comer y para dormir en el Hotel la habitación pequeña pero muy limpia y correcta , la recepción del Hotel correcta . El Restaurante :
Al llegar nos indicó el sitio de nuestra reserva una chica muy agradable , al tomarnos nota Cristian nos atendió muy correctamente y muy profesional nos recomendó un vino súper correcto para la comida, sabía muy bien de lo que hablaba , los entrantes mas que buenos, la cocina es muy muy buena y sorprendente , el postre dejaba mucho que desear , ahora bien le ponen todo el cariño a todo pero el servicio va muy descordiando , te sirven los aperitivos ( cerveza y martini) con el vino y los entrantes todo a la vez, un desastre entendimos que tenían mucha gente y estaban perdidos aún así nos encantó la atención y la cocina . El desayuno del hotel del día 23 a las 9 volvemos a lo mismo no pudimos desayunar hasta las 9:30 no tenían las cafeteras cargadas , no habían hecho zumo , no habían botellas de agua para beber , no habían platos , no habían cubiertos etc… la sensación que nos dio es que solo un chico había estado a la hora y el resto parecía que venían de bailar que eso nos daba igual pero tener a la gente esperando para desayunar da una imagen que no toca , los clientes nos mirábamos unos a otros atónitos. A lo que vamos, el Hotel junto con el servicio de desayuno 1- 10 un 3 , la cocina 7,5 porque la carne estaba fría y el postre no valía nada , el servicio lo vamos a dejar estar por el momento . En fin ! volveré a comer seguro los chic@s muy amables pero a desayunar al Hotel seguro que no.

Llanos M.

RESTAURANTE.
Teníamos reserva a las 15.15, llegamos a las 14.55 con un frío que pela fuera y muchas mesas vacías y nos dicen que nos tenemos que ir a esperar fuera hasta la hora. Fuimos de carta y queríamos pedir diferentes tapas a compartir para probar más variedad, pero nos obligan a pedir dos de cada e intentan convencernos de pedir más cantidad (pedimos más además de lo de las fotos). El servicio al principio un poco lento.
En cuanto a calidad precio se han venido bastante arriba. La comida está buena pero no para el precio que tiene.

Antonio F.

Fuimos a comer y nos hicieron esperar 20 minutos cuando se veía perfectamente que había sitio disponible para 2 personas.
La comida es escasa para lo que vale y si quieres una tapa sola te dicen que mínimo tienes que pedir 2 de cada tipo.
En general no lo recomiendo, calidad precio merece la pena cualquier otro restaurante.

Raul L.

Teníamos la reserva en el restaurante a las 15:15. Nos pasaron a la mesa a las 16:50.
El plato principal lo sirvieron a las 17:20 de la tarde. Por no hablar de la profesionalidad del personal para un restaurante supuestamente de esta calidad. Menú de 73€ sin bebida y no son capaces ni de servir el vino ni de cambiar los cubiertos. Y para colmo, cuando fuimos a pagar, “casualmente” se equivocan en la cuenta.
Cuando uno va a un lugar a gastarse este dinero, quiere que la experiencia sea especial. Y este sitio es todo lo contrario, no se trata al cliente como tal.
La comida normal, nada del otro mundo para el precio que es.
No volveremos.

N. H.

Estuve en el restaurante y lo recomiendo. Gran variedad de platos, con una presentación diferente, y deliciosos. Los entrantes son pequeños, está bien para poder probar varios, y algunos no se pueden pedir de forma individual sino de dos en dos. Te explican cada plato cuando te lo sirven, incluso te recomiendan como comerlos para apreciar todo su sabor. Imprescindible pedir la Croqueta, estaba espectacular. El “Arroz de trilogía de vaca gallega” estaba riquísimo, capa fino y sequita de arroz, y carne muy tierna. Y los postres, además de peculiares, como fue “Tu primer beso”, estaban muy buenos. Algo más caro de lo habitual pero tampoco me pareció excesivo. El local es grande y muy luminoso, aún así mejor reservar. Y la atención por parte de todos los camareros, impecable.

ECL

Fuimos a comer mi pareja y yo por segunda vez. Está vez íbamos sin menú y pedimos de tapas. La croqueta, espectacular al igual que el bikini de trufa, el carabinero y la carne. La carne un espectáculo que junto con los pimientos ha sido lo mejor de la comida.
De postre pedimos la famosa torrija para compartir sin embargo, nos ha dejado un mal sabor de boca ya que estaba fría y para nada tenía un sabor dulce sino que predominaba más el sabor amargo del cacao y de la canela ( de cantidad bastante bien para ser un postre para dos).
La puntuación baja se la pongo por el servicio... Han ido muuuuy lentos ( no solo lo opinamos nosotros, las mesas de al lado se estaban quejando por lo mismo), pedías algo y parecía no llegar la comanda a cocina. Es cierto, que el camarero rubio parecía ser el más efectivo además de ser uno de los más simpáticos.
La primera vez quedamos más encantados, está segunda vez no vamos con un amargo sabor de boca (supongo que por la torrija).

Dudamos si volveremos pronto.

Sarai C.

Hemos ido a comer el menú degustación tradición y ha sido todo un espectáculo de sabores y texturas. Las anchoas con Brioche y mantequilla, el arroz con gamba y velo de papada, el carabinero de Huelva y el flan nos han alucinado. La atención perfecta, al empezar hemos tenido un problemilla que han solventado perfectamente asumiendo el error, pidiendo disculpas y teniendo un detalle que agradecemos enormemente. Ha sido una experiencia maravillosa que si estamos por la zona repetiremos y por supuesto recomendaremos. Muchas gracias por todo

Raquel B. C.

Hemos ido a comer hoy el menú de navidad con varios platos a compartir, y por donde empezaría... porque ha sido un despropósito desde el principio. Hemos llegado a las 15.15h que era la hora de reserva y no se ha acercado nadie a nuestra mesa hasta las 15.50h a decirnos que queríamos de beber, sinceramente lo único que ha valido la pena es la croqueta, los platos fríos o no en su temperatura, el gambón a la plancha sin más, y congelado. El pescado servido con las raspas, la picaña no se podía masticar y se han llevado un plato entero... En fin, no ha habido ni un detalle o disculpa por si parte, vamos todo una pena porque íbamos con mucha ilusión a probar su cocina.