Ermita de Sant Antoni i Santa Bàrbara - Ulldemolins, Tarragona

La Ermita de Sant Antoni i Santa Bàrbara es un lugar de gran encanto situado en Ulldemolins, Tarragona, España. Su dirección es C/ Ermita de Sant Antoni S, 43363 Ulldemolins, Tarragona, España. Para contactarlos, puedes llamar al teléfono: 722297552 o visitar su página web: linktr.ee.

Este lugar destaca por sus múltiples especialidades que van desde ser una cabaña de montaña, bar, zona de senderismo, zona de pícnic, lugar de culto hasta un camping para caravanas. Es un espacio versátil que combina la tranquilidad de la naturaleza con diversas opciones de entretenimiento.

La Ermita de Sant Antoni i Santa Bàrbara es un destino ideal para los amantes de la naturaleza y la tranquilidad. Rodeado de paisajes impresionantes y con una atmósfera serena, es perfecto para desconectar y disfrutar de actividades al aire libre.

Además, cuenta con 166 valoraciones según Google My Business, con una opinión media de 4.4/5, lo que refleja la calidad y satisfacción de quienes han visitado este lugar.

Para quienes buscan un escape de la rutina y desean disfrutar de la naturaleza en su máximo esplendor, la Ermita de Sant Antoni i Santa Bàrbara es la opción ideal. Sus múltiples servicios y actividades hacen de este lugar un destino completo para pasar un día en familia, con amigos o simplemente para conectar con uno mismo.

La recomendación final es que no dudes en contactarlos a través de su página web para obtener más información y planificar tu próxima visita. No te pierdas la oportunidad de vivir una experiencia inolvidable en la Ermita de Sant Antoni i Santa Bàrbara

Opiniones de Ermita de Sant Antoni i Santa Bàrbara

Manoli

4/5

Bonito lugar en un entorno maravilloso. Tienes paelleros y mesas donde comer además de un bar donde tomar algo y refugio para dormir

Maria Fernandez Velasco

5/5

El exterior del refugio y el entorno expectacular!!! Comida km0 riquísima y de calidad. Personal muy amable. Ideal si te gusta la naturaleza y la tranquilidad. Lo recomiendo!!!

Chesco Real

4/5

El refugio está muy bien, dispone de zonas de barbacoas, parking y zona para campers. Hay varias rutas desde allí para hacer trekking. Los chicos que lo llevan muy amables y atentos, nos facilitaron todo lo que necesitábamos.

Clara Mente

5/5

Bien sitio para dejar el coche ya hacer excursión hacia ermita de Santa Magdalena y La Albarca o hacia la ermita de Sant Bartomeu o si eres de andar mucho se puede llegar al embalse de Margalef y dar la vuelta por todo el cañón.

Jose Antonio

4/5

Solo hemos parado para comer unos bocadillos y nos han atendido muy bien. Hay un amplio aparcamiento, mesas y servicio. Las opciones para comer eran limitadas pero no es un restaurante es una ermita que hace las funciones de refugio

Vane

5/5

Lugar donde desconectar. En plena naturaleza. Fantásticos talleres y l personal sencillo ,cercano y super familiar. M encanta. Lo recomiendo 150%

Emanuel nc

3/5

Si vas de barbacoa a pasar el día, está bien. Aunque los baños sucios y estropeados. Si vas de acampada regulada (libre) FATAL, MUY MALO. Zona de acampada sin sombra, terreno irregular y recoso, no delimitada.

Natalia Barreñada Olmo

1/5

Estuvimos este verano tres adultos y 4 niños, la peor experiencia en albergues que he tenido. Quedamos con el ermitaño a las 7 de la tarde para que nos entregara la llave y se presentó a las 9 de la noche estuvimos un buen rato a oscuras en la calle hasta que llegó, cuando nos abrió la puerta del albergue, lo primero que notamos fue la peste de la basura que los últimos inquilinos dejaron olvidada, el elbergue, en general, cocina, baños y habitación estaban sucísimos, peor que un bar de mala muerte, nadie había aseado el sitio cuando se fueron los últimos, cuando exigimos al ermitaño que ya que pagábamos debía estar todo, cuanto menos, limpio. Se puso a limpiar un poco por encima cuando ya eran casi las 11 de la noche. Los colchones y las almohadas dan verdadero asco. La placa solar no funciona, nos dieron un ratito de luz con un generador que hacía un ruido del demonio y además apestaba mogollón y ahí bien pegadito a la casa. Desde luego no vuelvo ni regalado. Y menos con niños pequeños. Una lástima porque la zona es preciosa. Quizás vale más la pena acampar en Santa Magdalena.