Cortijo Rural Majolero - Castillo de Locubín, Jaén

Cris P.

Estuvimos 5 personas (3 adultos y 2 niños) y 2 perros durante 3 noches en el cortijo de la derecha. Al leer tantas buenas reseñas, la verdad es que esperábamos algo mejor.

Positivo:
- La carretera estaba bien señalizada hasta llegar al cortijo (había leído en algunas reseñas que NO estaba bien señalizado y hay 6-7 carteles antes de llegar, imagino que la reseña será anterior a estos carteles).
- Al estar en mitad del campo no hay nada de ruido y el entorno es muy tranquilo.
- Había gel en los baños, lavavajillas, jabón de platos y bolsas de basura.
- La dueña fue muy amable ya que a nuestra llegada nos dio indicaciones de sitios a los que poder ir para comprar, ocio, etc.

Como negativo, bastantes cosas a comentar:
- La piscina tiene un acceso bastante complicado, es una cuesta en mitad del campo con un rollo de césped artificial superpuesto y sujetado con baldosas o algo así. Para subir y bajar en chanclas, a veces era complicado y los niños se llegaron a caer. Además, apenas tiene sombra (en las fotos se veían unas sombrillas y no las hay) y el primer día tenía como posos en el fondo. El resto de días tampoco estaba muy limpia.
- La ducha de la piscina NO funciona. Ni siquiera tiene las llaves instaladas.
- La parrilla estaba sucia, tanto la de obra como las rejillas que había sueltas; la paellera más de lo mismo.
- Faltan utensilios de cocina tan básicos como una espátula, cocinar es un poco complicado porque te tienes que apañar con lo que hay, muchos utensilios están rotos (imagino que es cosa de algunas personas que han estado en el cortijo y no han notificado que están rotas, pero también creo que es responsabilidad de quien alquila el revisarlo).
- Las habitaciones tenían polvo en los muebles, aparte de que se veía a simple vista, soy alérgica.
- Algunos cubiertos y vasos estaban sucios el primer día que llegamos a la casa.
- Hay wifi, pero no llega a la mayoría de habitaciones del interior de la casa ya que los muros son gruesos y el router se encuentra en el exterior, imagino que es compartido entre ambas casas. La solución sería fácil apañando un extensor de red.
- Aceptan mascotas, pero el cortijo es abierto en la zona del acceso por lo que si tus mascotas no son de estar pegadas a ti, aconsejo no llevarlas.

Otras cosas a comentar:
- Si mides más de 1,70m tu estancia será un poco incómoda, ya que el cortijo es antiguo y está hecho a la medida de las casas de antes.
- Pudimos contar hasta tres nidos de avispas en la zona de la parrilla y estuvimos toda la estancia peleándonos con ellas porque se meten hasta en la casa. En la ventana de la cocina también se colaban aunque estuviera todo cerrado (las ventanas son viejas lógicamente y no encajan del todo, así que se colaban por los huecos). Esto al final es comprensible hasta cierto punto porque estás en mitad del campo, pero creo que está bien notificarlo.
- Las toallas están tiesas y raspan, si te gustan así no tendrás problema.
- El segundo día se fue la luz, aunque no saltaron los plomos. No teníamos nada conectado porque no hay aire y quizá lo que más consuma sea la vitro y el lavavajillas, que no estaban puestos.
- Cada vaso y cubierto eran diferentes, parece que todo lo que hay en la casa son sobras de otra. Los vasos son de unos 200ml, diminutos.
- Nos dijeron que no desmontásemos las camas que no usáramos (lógico, para no tener que rehacerlas) pero nos dio mala sensación ya que parece que si una cama no se utiliza en un mes, está el mismo mes con las sábanas y colcha puestas, recogiendo polvo como los muebles.
- No vimos a la dueña ningún día de la estancia. Pudimos hablar con ella por Booking / whatsapp, pero una vez allí nos atendió su padre al llegar y su madre al irnos. No podemos opinar sobre ella ya que no sabemos quién es.

Nos pareció una estancia bastante cara para los servicios que se ofrecen, las instalaciones y las condiciones de la casa. Pagamos 450€ por 3 noches y qué menos que esperar al menos que las habitaciones estuvieran limpias.

Adrian D. A.

Negocio familiar, gestionado desde la distancia por los hijos pero presencialmente el gestor/controlador de la finca es un señor mayor, con nulas capacidades para gestionar un negocio así. Se queda rondando por la zona hasta las doce de la noche para comprobar que se cumplen normas (vigilando, vamos). Al día siguiente se procedió al pago de las personas que estuvimos de más (previa explicación y comprensión de los dueños) con dificultades desde un inicio porque el señor no colaboraba en absoluto.
Se dijo un precio inicial que al final acabaron subiendo por la insistencia del caballero, evidentemente se pagó hasta el último céntimo. Faltas de respeto y chulería por parte de dicho señor. A pesar de realizar el pago correctamente en el momento (EN EFECTIVO claro) posteriormente aseguran que no se ha pagado y que se les debe dinero siendo completamente falso.
Nunca repetiría.

Juan B. M.

Desde que reservamos hasta que nos fuimos ayer por la tarde, fue un acierto todo.
La dueña y su padre super atentos con todo. No nos faltó de nada. Lo tienen todo cuidado con mucho detalle. El acceso al cortijo muy bien indicada por toda la carretera.
Las casas tenían de todo, y en las zonas comunes varias chimeneas, mesas silla, de todo.
El entorno perfecto para relajarse.
Super contentos con la estancia con los amigos, tanto que repetiremos.
Recomendable al 100% para descansar y desconectar.

Celia C. N.

La carretera está bien señalizada, que ya es bastante teniendo en cuenta el sitio.
Eso sí, la casa muy mejorable: la tele no tiene señal, el WiFi no llega en media casa, además se fue el agua durante toda una tarde (por supuesto sin tener compensación de ningún tipo aunque el servicio que pagamos fue deficiente completamente), la casa tiene techos bajos, aunque eso es comprensible al ser antigua. Lo que no es comprensible es la suciedad de los utensilios de cocina, aunque hay casi de todo, pero en mal estado. La chimenea, puesto que nosotros fuimos en invierno la única fuente de calor en la habitación principal no absorbe el humo debidamente. En las habitaciones gracias a dios hay calefacción.
La dueña no aparece, son sus padres los que se ocupan de la casa.

Elena H.

Un lugar de paz conectado con la naturaleza y donde realizó mis retiros , me ofrece unas estancias acogedoras y con capacidad suficiente para llevar mi grupo que sientan la paz y poder trabajar con ellos sin ser interrumpidos por nada ! Paz sin duda un magnífico sitio para resetearte por su tranquilidad

Arturo A.

Tres días con una tranquilidad inigualable , es un entorno muy acogedor, el trato del personal excelente, con mucha amabilidad y sin faltarnos de nada , todo muy bien cuidado y limpio, un lugar ideal para descoenctar y pasarlo bien , sin duda lo recomiendo.

jesus V.

Decidimos celebrar una jubilación de un grupo de compañeros viniendo de madrid. Lugar con encanto con posibilidades de hacer actividades al aire libre .. cortijo que cuplé con las perspectivas puestas por el entorno y las propia casa . El dueño y la hija muy cercamos y facilitándonos todo lo que nos hacía falta… un diez!!

Toni A.

Se trata de un cortijo situado en mitad de la naturaleza, rodeado de olivos. Desde el momento en que entras te translada a otra época por su ambiente rústico. Está muy cuidado, con muchos utensilios y decoraciones de la época. Estuvimos pasando unos días junto a un grupo de amigos y la experiencia no pudo ser mejor. No nos faltó de nada y los dueños no pudieron ser más amables y agradables. Sin duda lo recomiendo y nosotros volveremos en cuanto podamos.